miércoles, 29 de julio de 2015

TORCAL DE ANTEQUERA

Un laberinto de esculturas. La sala principal de un museo de geología encaramada en las crestas de una serranía desde la que se otea el mar. Maravilloso lugar, el escenario de un cuento.



















MARIPOSAS

Señales multicolores y también crípticas sobre la pureza del entorno, su presencia transmite los síntomas soñados de un medio aún sin destruir. Su parte visible y llamativa es el final de un proceso vital casi oculto y poco observado.













miércoles, 22 de julio de 2015

CAMPOS DE LUCENA - RETAZOS AGRESTES I

Infinitas ondulaciones de olivar, extinguidos viñedos y alguna sementera. La Sierra de Aras como vigía central de los campos de Lucena. Al oeste los santuarios del agua, las lagunas y los encharcamientos. Un paisaje dominado que se rebela al ser atravesado por el Anzur y limitado por el Genil.
Laguna Amarga, profunda y majestuosa, testigo de supervivencia.

Laguna del Taraje, pequeña y escondida, exhausta sin lluvias.

Laguna Dulce, una inmensa tabla de agua siempre acosada.

Río Genil, trazando los escarpados límites con los campos de Málaga y Sevilla.

Río Anzur, el corredor natural entre la explotación agrícola.

Laderas de Morana, verticales descensos hacia el Arroyo del Infierno.

El Cerro de Acebuchoso y sus colindantes. Reflejos de un bosque mediterraneo.

Laguna Amarga, cinturón de tarajes.

Río Anzur a su paso por Los Piedros, cerros de yeso y planicies de arena.

Río Anzur, oculto entre sombras, cobijando a sus aves.

Las encinas aisladas parecen pedir perdón por sobrevivir a nuestra ambición. Apenas quedan en estos pagos encinares de gran porte.

Cerros de Mortero-Sierrezuela, una minúscula montaña, cercana para nuestros juegos infantiles acompañados de los olores a especias.

La nieve es visitante efímera, rara vez se queda a dormir.

Laguna Dulce, ocre y triste durante un largo estío. 

Charcas de El Canónigo y Las Barqueras, la irresistible atracción de lo acuoso.

Sierra de Aras, atalaya dominante, albergue de historias.

Campos de Lucena, al oeste zonas húmedas, al este imponentes sierras calizas.